La vida ante la adversidad
Vio su artículo rechazado hasta en quince ocasiones. Sabe lo que es resistir ante las dificultades. No puede evitar sentirse identificada con las bacterias que tuvieron que desarrollar más de veinte tipos de metabolismo diferentes para adaptarse a condiciones desfavorables. Sin embargo, siempre le ha llamado la atención que los seres pluricelulares solo hayan conocido dos tipos: el aeróbico de los animales y el fotosintético de las plantas. ¿Qué les allanó el camino?
Bien porque se convirtieron en brillantes bioingenieras, bien porque hubo una digestión fallida, Lynn imagina bacterias y arqueobacterias engulléndose y fusionándose en varios pasos para consolidar una simbiosis endógena.
El año en que por fin se publicó su artículo, 1967, Lynn volvió a “fusionarse” en matrimonio tras divorciarse de Carl Sagan. Fuese Lynn Sagan o Lynn Margulis, la esencia de la investigadora era la misma. Merecía la pena comprobar si los cloroplastos y las mitocondrias de las células conservaban la esencia de una vida anterior como bacterias libres, y resulta que el ADN de ambos orgánulos es diferente al de la célula y se duplica de manera autónoma cuando esta se divide.
Lo que ha unido la adversidad que lo mantenga la evolución.
Esta entrada participa en el blog de narrativa científica Café Hypatia con el tema #PVvida.
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